Ve a la carnicería y cómprame 1 kilo de cochino.
Y Jaimito fue directamente a la carnicería.
Mientras él estaba esperando que el carnicero terminara con otro cliente, Jaimito se metió el dedo en la nariz
Cuando lo vio el carnicero le dijo:
¡Cochino!
Y Jaimito le contestó:
¿Cómo lo supo?.... DEME ¡1 kilo!
No hay comentarios:
Publicar un comentario